Una semana con discapacidad...

...y cinco mas por delante.

Cuatro diferentes dedos, un brazo, clavícula y ahora una pierna(peroné) forman parte del circulo óseo que en algún momento de mi existencia fueron averiados por impactos de diversa índole.

Ahora debo rendirme ante la fractura que me inhabilito con mayor fortaleza y durante una época de arduo trafico laboral.

La magnitud de valoración que he activado en mi alma al hecho de tener movilidad 100% es enorme, con profundo análisis aprecio la posibilidad de moverme con soltura y mayor rapidez que las que te brindan un par de muletas.

A estas alturas seguramente sabré ya si deba someterme a un bisturí, serian los primeros puntos en el mapa de mi cuerpo, la cirugía me alejara aun mas de la realidad de volver después de cinco semanas a tratar de caminar.

La ida al baño se convierte en una estrategia calculada, el caminar por el pasillo del canal que te lleva al estudio es como una travesía interminable, las distancias que antes eran intrascendentes ahora son mini maratones, la plácida dormida se convierte en una coreografía constante en la cama.

El proceso de ajuste fue algo arduo, no duradero, solo intenso, una vez superado, solo queda hacer cada  día divertido y apelar a la dosis de actitud que todos tenemos dentro pero activamos con variables distintas.

No deja de molestar el hecho de solicitar la ayuda extra, la misma que llega siempre con buena onda y sinceridad...me pregunto si a la cuarta semana la ayuda seguirá siendo real y no algo ya dentro de las premisas de lo cargoso.

Extra tiempo para escribir y pegarle una limpieza profunda a mi computadora, ordenar todos los archivos que estaban estacionados hace largo tiempo en diferentes recovecos del ordenador, el tiempo adicional en cama acelera aspectos que estaban retrasados o en espera, hay que aplaudir lo que se puede rescatar de esta circunstancia.

35 días mas por delante, les cuento detalles por esta vía...si es que a alguien le interesa, al fin y al cabo, para eso son los blogs.