http://www.libertadperiodismoyetica.blogspot.com/
POR
@RicardoDoylet
Todo sigue igual en Barcelona
¡Yo estuve dentro del monstruo!... Nadie me lo contó.
Tuve la oportunidad de ver las cosas desde el ángulo que no muchos lo han visto. Fui yunque… después de ser martillo.
A través de los años, la institución deportiva más popular del país, ha vivido sufriendo de urgencias que nunca terminan, alimentando esperanzas que nunca fructifican y repitiendo historias que siempre terminan con finales tristes.
¡Qué fácil que se ve desde afuera!
Viven insistiendo en ver los errores que no cuentan en lugar de terminar con los que realmente están enterrando a la institución. La calentura no está en las sábanas.
Los problemas no están en contratar los jugadores más caros, en prometer títulos, en vivir de las glorias pasadas o maquillar año a año la temporada con un par de triunfos épicos.
Una nueva etapa de gloria no se puede seguir construyendo en piso de barro.
Hoy gobiernan en Barcelona los dueños de la verdad, los que sabían cómo hacerlo y tenían cómo hacerlo, los que solo veían fracasos, irregularidades, malas intenciones e incapacidad en los que lo precedieron, o por lo menos, en quien los precedió.
Barcelona se iba a hundir por la falta de transparencia económica, por los fracasos deportivos, por las demandas de jugadores y empleados, por la falta de dinero, por los sueldos atrasados, por los informes económicos no aprobados, por la falta de seriedad con sus históricos, por la utilización política de la institución, por dirigentes chiros, por promesas incumplidas, por falta de institucionalidad, por manejo irresponsable y dudoso de las divisiones formativas… Y todo eso iba a cambiar de inmediato.
Han pasado más de dos años desde que Barcelona Sporting Club cuenta con esta nueva administración. ¿Qué ha cambiado?
¿Ya se aprueban entre aplausos los informes económicos?
¿Los empleados están con sus sueldos al día?
¿Los jugadores ya no reclaman sueldos atrasados?
¿Los que le dieron glorias a Barcelona son tratados con excelencia?
¿Ya no hay demandas de los jugadores y entrenadores que son dados de baja en Barcelona?
¿Todos los acreedores son atendidos y siempre contestan sus llamadas?
¿Ya les instalaron su marcador electrónico y le construyeron su sede social?
¿Ya hicieron legalizar el estatuto que fue aprobado reglamentariamente en asamblea hace más de dos años?
¿Se fueron todos los malos dirigentes de la directiva anterior o siguen algunos ahí?
¿Las divisiones formativas son una maravilla y no se ha ido ningún jugador del club?
¿Ya se transparentaron los contratos que se firman en el club?
¿Ya están presos todos aquellos que “destruyeron y robaron” a Barcelona?
¿Por lo menos ya les siguieron juicio a esos “malignos directivos”, o siguen haciendo negocios con ellos?
Lamentablemente la respuesta a todas esas preguntas es NO.
Todo sigue igual que cuando estaba la denominada “peor directiva de la historia” en Barcelona.
¡Todo sigue igual!... Bueno, a fuerza de ser justos, no todo sigue igual.
Se consiguió un título que puso una corona muy deseada en las vitrinas. Era lo urgente, aunque aún no se conozca todo el precio que hay que pagar por ese título. Si los aficionados creen que eso es suficiente para hablar de éxitos, entonces tienen todo lo que merecen y no hay nada que reclamar.
Hay otra cosa que también cambió: La forma en que se ven desde afuera. Los mismos problemas y noticias que para algunos eran motivos de condena, prisión o expulsión del club, hoy no pasan de ser pequeños problemas que de una u otra manera deben ser solucionados por los directivos en cualquier momento.
Aquellos que decían que quienes no tenían dinero no podían manejar Barcelona, hoy no hacen otra cosa que reclamar la presencia de la hinchada para solucionar los problemas.
¡Qué distinto ha sido desde adentro!
Lo que hay que solucionar en Barcelona no es lo urgente, es lo importante.
Cuando por lo menos la mitad de las preguntas que se hacen en este escrito tengan un SÍ por respuesta, la institución estará en el camino correcto, de lo contrario, el final seguirá siendo el mismo.
2 comentarios:
El tocar un tema tan delicado como este, siempre traerá contras y pros, por lo que significa Barcelona en esta sociedad. Yo como muy pocos creo, llevo siendo socio de Barcelona desde hace años. Y como muchos a veces he optado estar al margen de todo. Nunca he dejado de pagar la mensualidad al equipo, pero nunca he asistido a una reunión de socios.
A veces creemos que con dar un aporte, o gritar a todos los vientos que soy Barcelonista, hacemos más grande a la institución.
Pero no.
Haciendo una confesión personal de cada uno de los que hacemos Barcelona, desde el pequeño que crea conciencia en el padre hasta el presidente del club, todos hemos llevado de alguna u otra manera a que el club este en la situación que este.
Y el cambio es lo que debe existir de una vez por todas, en esta situación no se debe ir año tras año con una mano adelante y otra mano atrás, sobreviviendo sin saber que nos depara la siguiente semana, un nuevo juicio, una nueva deuda, un nuevo problema.
El plan a largo plazo parece ser la mejor opción, aquella en que nos concentremos en la institución dejando de ser un equipo comprador a ser un equipo que fomente la institución.
Mi sueño, como muchos, creo que es el de tener un club que tenga una sede para el equipo de primera y otra sede para los juveniles, con recintos para que los chicos puedan vivir y poder darles desde estudios mientras se educan para vivir del futbol, las cuentas claras del club, ser el club con más socios de Sudamérica, con jugadores contentos por estar en el club y una hincha orgullosa de su institución.
Llegar a ese sueño, es algo que no podemos cumplir por la URGENCIA de un título más.
Perdimos 14 años tratando de conseguir un título, cuando pudimos haber creado una mejor institución. Creo, que las prioridades nos llevaran en pocos meses o un par de años a tomar la decisión de dejar a un lado el título, para concentrarnos en las benditas deudas que nos abruman.
Es ahora y el momento de ir fomentando el concepto de que el club necesita más que un título, necesita una reingeniería organizacional (futbolista-administrativa), el de vender la idea que más que el titulo necesitamos al club que sobreviva 100 años más, el de incorporar más a los barcelonistas a esta institución que tanto los necesita ahora.
Es hora de entender que esta institución podría desaparecer si las deudas nos consumen, y el de reconocer que el equipo ahora nos necesita, a comprender que el club necesita una transición, ya nos dio 14 títulos, ya nos dio innumerables glorias, es hora de darle tiempo al club y juntar hombros para salir de esta crisis, sin exigirle más de lo que puede en lo futbolístico, y concentrarnos en las ideas para hacer que el club, sea una Institución de primer mundo, como su nombre se lo merece.
@DaniloVillacis
Publicar un comentario